martes, 24 de enero de 2012

REDONDEANDO UN PAR DE TEXTOS

M

Mc Donald´s, ¡la concha de tu madre! ¿Por qué mierda no me dejás ver el mail ni me das acceso a ninguna red social? ¡La puta que te parió! Me das baño gratis…, ¿y te ponés ortiva con Internet? Ves que sos la peor escoria que existe. ¡Qué poco te fijas en mis necesidades! ¡Y qué mal que le hacés a mi salud! La verdad, es que recién me pongo  pensar en lo insano que sos cuando no me dejas hacer algo tan simple como chequear mis mails. De no ser así, ni me hubiera hecho problema. ¡Mc puto!

Av. Scalabrini Ortiz.
18 de diciembre de 2011, 19.27hs.


Jazzy

De pronto me pudrí y quise escribir para mí. Sólo por el placer de hacerlo. Desde ya que no es algo, en absoluto, original. Sin embargo hay algo que siempre me empuja a olvidarme del quilombo que hacen las mujeres holgazanas, que se ríen “a tontas y a locas” en éste local de comidas rápidas. Así también me olvido del bullicio que colma el ambiente cerrado, pero bien acondicionado, por unos aparatos blancos y largos.
Lentamente consigo hacer a un lado todos los ruidos que son molestos a mis oídos. Lo hago sobre todo para rescatar esa melodía que jazzea allá al fondo como sonido ambiente y todo a mi alrededor retrocede 60 años. Ahí suben al escenario los vientos. Se quedan al lado del piano, mientras ella prevalece con esa voz radiante. Luego de una primera hipnosis descubro que detrás golpean el contrabajo junto a la batería, ambos generan el lecho superfirme de rosas donde remane esa tierna voz femenina. Lentamente y al compás se va uniendo la voz de él, para fundir en un decoroso final con el volumen de la banda que va disminuyendo en syncro hasta el infinito de mi mente en un momento que nunca se acaba. 
Seguía el desfile de jazzeros. Mi atención, en cambio, continuaba en la escena anterior. Pocas veces me impacta de tal forma una onda sonora emitida por unos parlantes de baja calidad, mal atornillados al techo de un local de comidas rápidas.


Una Flaca

Ella. Con esa teta apenas bultosa que pretende asomar sobre el escote mientras cae de su cuerpo flaco, se transforma en un detalle increíblemente sensual y en un momento tan valioso como para recordarlo en éstas líneas. Vuelve a agarrar el celular y la mueca de su cuerpo sentado improvisa de la nada la imagen de una ninfa. Es que cada mover suyo transforma mi sentir en un fénix incansablemente resurgente.
Más líneas sigue generando ella. Que, para la perdida vida de un escritor (todavía no confeso), es más que una musa -o mejor- una moza que nunca compartirá otro momento con él más que sobre éste papel, ni más allá de alguna fantasía.
Levanto la cabeza y aparecen más líneas en el papel e incluso muchas más dibujadas y animadas en mi sesera.
Uy! Cae la líbido de Freud. Se acaban las… líneas…
(Leer en slow-motion la línea siguiente)
Ahhhh´´iiiííííí… VViieeennneee ssusussssuuuu AAAaaaammiiiiggggaaaaa.
Está clarísimo que no es linda.


Pobre pela.

Un pelado con pinta de pseudo músico, pseudo gay, pseudo amigo de una mina a la que   -claramente- se quiere coger. El chabón se zarpa de chamuyo. El problema es que no se da cuenta que su actitud pedante, no hace más que secarle la zanja a su pseudo amiga mientras comparten la mesa en la que ya comieron. Dos conclusiones: Uno) El pelado hoy no coge. Dos) A ella No le importa su pito.
De fondo la guitarra enfundada está sentada y apoyada contra la pared, con la gorra del pelado tapando el clavijero. Mientras se ríe de la situación de su pseudo dueño, habla con la bolsa de ropa que está sentada enfrente y al lado de la pseudo amiga.
No te rías lector porque ya no pasa nada importante. El pelado se fue al baño. Ella juntó las cosas y cuando dieron las ocho, nunca se acompañaron. El pelado se acordó que la guitarra enfundada le había quitado la gorra en una broma pesada. Se la puso y se tomó el sesenta a Nuñez. Ella, el Subte a Catedral.


 Reflexivo

Creíste que era la suerte pero fue una serie de hechos encadenados los que hicieron que el resultado fuera de ese modo.
La hoja cuadriculada denota estructura y ya marca una forma y obliga a organizar. Y es probable que una mente se vea debilitada a la hora de asociar estructuras de diversa procedencia o a la hora de pensar creativamente. Por eso es recomendable comenzar a elaborar una idea sobre una hoja en blanco. Esto es para fomentar la asociación de una forma más libre y aleatoria. Salvo que una mente sea lo suficientemente ligera y estimulada para elaborar pensamientos diversos y de diversas procedencias, hilarlos, y, una vez que se ha tomado una distancia considerable entre un razonamiento y otro, ésta sea capaz de unirlos bajo un mismo concepto. He aquí la idea que no se les ocurre a todos. He aquí también, la capacidad de permanecer enfocado durante un lapso prolongado de tiempo manteniendo siempre la ubicación del rumbo con un objetivo claro y durante todo el recorrido del pensamiento. Por lo visto hasta aquí llegó mi foco. Porque no encontré nada más interesante para decir. Y algunos escritores dirían “¿es que todavía no terminaste la primera página y ya querés una calle? Seguí escribiendo y dejá de ser pretencioso y ansioso. La ansiedad nunca te ha llevado a buen puerto.
Otra  buena alternativa cuando se agotan las ideas es hacerse más preguntas.
¿Qué se entiende por “llegar a buen puerto”?
Llegar a buen puerto, en publicidad, es demostrar a través de una campaña que uno piensa diferente y que de esa manera llama la atención e interviene en la cultura de la gente con un sentido particular, en el mejor de los casos.
El hecho de que la influencia en la cultura tenga la exigencia de suscitar un sentido en particular, es algo que diferencia claramente a la Publicidad del Arte en sus sentidos más amplios. Ya que el Arte contempla la posibilidad de ser interpretado de diferentes formas y la publicidad necesita, a ultranza, de un mensaje lo más claro posible para que sea interpretado en un solo sentido: Vender algo.
Es tremendo cómo la ansiedad se comporta de un modo nocivo generando que los pensamientos tiendan a ser siempre conclusivos y no inclusivos ni transitivos. Muchas veces es necesario generar pensamientos transitivos ya que podría ser una buena alternativa en éste caso. Dado que al volver a ver el camino transitado una cualidad conclusiva puede ser de mucha utilidad o aplicable en diferentes partes del tránsito para poder decir muchas cosas distintas y, posteriormente poder formular varios conceptos para así elegir algunos de ellos (los más interesantes) y tener variedad a la hora de presentar un trabajo creativo. Versatilidad, gente, versatilidad de la materia gris. Muy difícil de conseguir y todavía más difícil de estimular debido a la vagancia innata del ser humano para utilizarla.